Lo bueno de Internet es que podemos encontrar prácticamente cualquier cosa. Las posibilidades son tantas que es normal encontrarse un poco perdido a veces. Pero, en medio de ese mar de información, también existen contenidos puestos a disposición de forma ilegal. Son textos, películas, música y diversos tipos de materiales que son protegidos por derechos de autor y que no tienen permiso para ser compartidos libremente. Además de eso, el acceso a contenidos ilegales también puede traer riesgos de seguridad, como la presencia de virus virtuales, entre otros.
Pero la buena noticia es que también podemos encontrar numerosos materiales que pueden ser consumidos por el usuario común sin ningún problema. Entre ellos, están los contenidos bajo el sello Creative Commons (puedes leer más aquí), una licencia que permite el uso libre y y la posibilidad de compartir el contenido sin fines de lucro.
Otra opción de uso gratuito son los archivos que se encuentran en dominio público. El período de vigencia de protección por derechos de autor varía de país a país pero normalmente finaliza entre los 50 y los 70 años posteriores a la muerte del autor. A partir de ahí, cualquier persona o empresa puede usar ese contenido.
En la página web de la Biblioteca Nacional de España, por ejemplo, se ofrece información sobre los autores españoles cuyas obras se encuentran en la Biblioteca y están en dominio público, por lo que pueden ser editadas, reproducidas o difundidas públicamente.
PARA ESTUDIAR – Para quien busca material para estudiar on-line, una indicación es el portal YouTube Edu (puedes leer más aquí). Allí son puestos a disposición del público general vídeos gratuitos organizados por temas. Otra excelente opción para los más jóvenes es el sitio web Leemos, promovido por Fundación Telefónica (puedes leer más aquí), un proyecto de fomento de la lectura dirigido a toda la comunidad educativa: docentes, alumnos (5º y 6º de Primaria, 1º y 2º de E.S.O.) y familias.